Autor:
Anónimo.
Título:
EL BÁRBARO EN SALAMANCA, POR EL
BÁRBARO DEL SUR.
Publicación:
Museo Internacional del Estudiante, 2009.
Ver. original:
Salamanca.
Fecha:
Número de Febrero de 1914,
p. 8.
Cuando El Bárbaro dejó de oír el canto de
las piedras doradas, cuando la historia dejó de hablarle quedamente,
amorosamente, como en una caricia lenta y serena, hasta su oído
subió en murmullo de colmena insurreccionada, la charla popular que
hablaba de pasioncillas, de las mezquindades, de la pobreza de la
más humana de las condiciones.
[…]
LA TUNA DE SALAMANCA
Y lo primero con que topó fue con unos
estudiantes, que en comparsa grotesca, recorrían las calles de la
vieja ciudad, y como lo hicieran tan mal, y fueran envueltos en la
bandera universitaria, les espetó el siguiente razonado discurso:
Más valiera malandrines indecorosos, que
pidierais el auxilio de Apolo antes de lanzaros por esas calles
haciendo daño a los oídos y gastando un tiempo que os ha de hacer
falta mañana.
¿Qué noble afán os guía? ¿Qué goce pleno ansiáis?
Y como no le contestaron, le miró con lástima y
siguió su camino.