Autor:              P. de S.

Título:             CRÓNICAS.

Publicación:   Museo Internacional del Estudiante, 2009.

Ver. original:  El Lábaro.

Fecha:            Sábado, 13 de febrero de 1909, p. 1.

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Todo el mes es Carnaval.

            No deseo mal a nadie; pero ¡hum!, a esos parrandistas que han surgido este año, no sé si me decidiría a llamarles algo feo. ¡Cuidado si son latosos! Más que una lección de Procedimientos judiciales. Yo que creí que eran estos el sumun.

            Pero no. A todo hay quien gane. A los adoquinadores de la calle de la Rúa, que habían dejado muy decente enarbolado el pabellón de inacabables, los dejan tamañitos estos jóvenes antiarmónicos que me dan hoy materia.

            En la plaza, terminado el paseo. Quedamos volteando, el lector, unos amiguillos y yo.

Empieza el desfile. De aquí, de allá, de acullá, de todas partes surgen comparsas. Pasa una comparsa; pasa otra comparsa; pasa otra comparsa; pasan N comparsas.

Esta es la Tuna escolar. Bien va. Son simpáticos estudiantes que lo hacen bien. Adelante.

Esta es la rondalla Bohemios. Son seis aficionados que tocan con gusto y se les puede oír. Pasen también.

Pero no pasen más. Es decir, no debieran de pasar más. Y pasan, lector amigo. Pasan unas matracas inaguantables, compuestas de jóvenes alegres, decididos y de buen humor, que han adelantado el Carnaval quince días. Estos jóvenes soplan en una calabaza hueca, o arrascan en un violín ronco, o rasguean en una guitarra rota.

Efecto mágico de una bando.

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P. de S.